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Sí, las cosas ciertamente han cambiado, para Rivian y para el mundo, desde que el fabricante de automóviles debutó en los EE. UU. en 2021, publicando la oferta pública inicial más grande que el mercado de valores había visto en siete años. Un gran cambio es que las tasas de interés son más altas, lo que hace que las compras grandes sean más costosas de financiar y que los compradores se vuelvan más cautelosos a la hora de comprar cualquier cosa, incluidos automóviles nuevos.
La opinión generalizada sobre los vehículos eléctricos también ha cambiado. Los datos de ventas sugieren que los fabricantes de automóviles eléctricos han logrado avances entre los primeros usuarios de mayores ingresos, que tienden a estar entusiasmados con cualquier tipo de tecnología nueva. De hecho, este es el tipo de conductores que están en la mira de Rivian: guerreros de fin de semana con monedas de repuesto. Pero ahora los fabricantes de automóviles deben llegar a conductores habituales que son menos pacientes y menos indulgentes cuando se trata de adaptarse a un nuevo tipo de vehículo, y mucho menos pagar una prima por ese privilegio. Scaringe lo expresó de esta manera en una conversación reciente con inversionistas: “¿Cómo logramos que el 93 por ciento del mercado que no compra un vehículo eléctrico compre el producto?”
Rivian espera que una opción más barata haga parte de ese trabajo. Con un precio de 45.000 dólares, el nuevo vehículo es más comparable a los vehículos eléctricos de tamaño mediano, incluidos el Hyundai Ioniq 5 y 6, el Ford Mustang Mach-E y el Tesla Model 3. También está más cerca del precio promedio de transacción de vehículos en EE. UU. del mes pasado: por vehículos con cualquier tren motriz: desde $47,400, según Kelley Blue Book.
Sin embargo, es probable que haya mucha competencia más barata antes de que el R2 salga de la línea de producción dentro de dos años. Para entonces, podría llegar un camión compacto “urbano” de la startup californiana Telo Trucks, diseñado por Fuseproject de Yves Béhar. Lo mismo puede aplicarse al EV3 de Kia, que actualmente es sólo un concepto. Ford planea producir un nuevo Explorer eléctrico. Mientras tanto, Tesla ha anunciado que actualizará su plataforma en 2025 con un nuevo vehículo de «próxima generación» que finalmente podría alcanzar el mítico precio de 25.000 dólares de la compañía.
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